Con motivo de ésta conmemoración elaboramos una modesta publicación con la recopilación de datos históricos que muestran una breve semblanza de la historia de la Agrupación Socialista de Villescusa y de las personas que fueron protagonistas en su devenir, desde las vicisitudes de los movimientos obreros que la dieron origen, hasta nuestros días.
Luis Eduardo Echevarria, Alfredo Pérez Rubalcaba y Lola Gorostiaga saludan a las más de 600 personas reunidas en La Concha el día 10 de Noviembre de 2007 con motivo de la conmemoración del centenario de la Agrupación Socialista de Villaescusa.
HISTORIA DE LA AGRUPACIÓN SOCIALISTA DE VILLAESCUSA – LOS ORÍGENES
La situación del proletariado español en el último tramo del siglo XIX era absolutamente precaria: sueldos ínfimos, jornadas de trabajo de doce o más horas, escaso poder adquisitivo, ausencia total de prestaciones sociales, etc. Las cosas no mejorarían mucho en las primeras décadas del siglo XX, pese a la aparición en algún momento puntual de una tibia legislación sociolaboral promulgada a remolque de enormes esfuerzos reivindicativos que, en la mayoría de los casos, sería incumplida sistemáticamente. Las acusadas diferencias entre las distintas capas sociales, provocadas sin duda por el desarrollo en aquellos años de una incipiente sociedad capitalista y burguesa, provocó también el desarrollo de la fuerza de las clases populares, en especial de una clase trabajadora que, más concentrada, organizada y homogénea, trató de forjar instrumentos de defensa a través de la lucha tanto desde dentro de los propios centros de trabajo -movimientos societarios-, como tratando de obtener representación en los órganos de decisión propios de un sistema democrático -lucha política-. Con esta estrategia el progreso del movimiento obrero convertido en exigencias sociales trata de legitimarse en el marco de una determinada ideología política que, reconocida legalmente, se les aparece como la mejor de las alternativas posibles.
En el marco del contexto social, económico y laboral del Villaescusa de aquellos años, esta primera entrega de la historia de nuestra Agrupación Socialista se centra sobremanera en lo acontecido en torno a los núcleos de trabajo de las explotaciones mineras y en las industrias sidero-metalúrgicas, ya que, aunque los principales cambios llegaron de la mano de esta actividad productiva, también hay que significar que a finales del siglo XIX nuestra comarca igualmente se distinguió por el auge experimentado en el sector de la ganadería como actividad económica enfocada hacia la producción lechera, y donde tuvo especial trascendencia la implantación en su entorno de industrias como la multinacional Suiza “Nestlé” en La Penilla de Cayón (1905), la Cooperativa “SAM” en Renedo de Piélagos y tiempo más tarde otras empresas lácteas de menor entidad, como la fábrica de leche “El Henar” en La Concha de Villaescusa. El conjunto de todas estas actividades productivas marcaría principalmente la actividad social y económica de nuestros pueblos, relegando a un papel secundario a la actividad agrícola, predominante hasta entonces.
La explotación de los yacimientos de hierro del macizo de Peña Cabarga se remonta a la época romana, lo que se deduce de la aparición en su entorno de diversos vestigios arqueológicos y de una cita del escritor romano Plinio. De todos modos, la historia minera de la zona puede ser aún más antigua, tal como parece indicar el hallazgo en la mina “Crespa” de Cabárceno de un antiquísimo caldero de bronce, fechado en unos 900-600 años antes de Cristo y conservado en el Museo Regional de Prehistoria. Entre los siglos XVII y XIX, las minas del macizo de Peña Cabarga abastecieron de hierro a las reales fábricas de cañones de Liérganes y la Cavada.
Pero es hacia el año 1880, con la instalación en la zona de numerosas compañías españolas y extranjeras, cuando la actividad minera comienza a desarrollarse a gran escala en las comarcas del Sur y Oeste de la Bahía de Santander, sobremanera en los municipios de Penagos y Villaescusa. Una actividad que modificó de manera drástica y de forma extraordinaria el contexto social, laboral y económico que hasta entonces había significado a estas zonas y a sus poblaciones. Como consecuencia de la necesidad de mano de obra abundante y no cualificada que inevitablemente trajo consigo la implantación de esta nueva actividad productiva, se produjo un desmesurado crecimiento demográfico que desbordó en muy poco tiempo las infraestructuras existentes por aquel entonces en la comarca, infraestructuras que a partir de ese momento iban a resultar insuficientes para atender dignamente las necesidades cotidianas más elementales de los núcleos de población.
Precisamente y para certificar ésta aseveración, de los censos de población de aquella época se obtiene el dato de que a comienzos de la segunda mitad del Siglo XIX el municipio de Villaescusa contaba con algo más de 1.100 habitantes, viéndose envuelto en los años sucesivos en una espiral de crecimiento que provocó que en apenas unas décadas se viera triplicada su población:
DATOS DE POBLACIÓN DEL MUNICIPIO DE VILLAESCUSA
Año | 1850 | 1860 | 1877 | 1887 | 1897 | 1900 | 1910 | 1920 | 1930 |
Habitantes | 1.121 | 1.248 | 1.319 | 1.423 | 2.044 | 2.970 | 3.209 | 3.489 | 3.390 |
Conjuntamente con este aumento de población y a sus primeras derivaciones ya citadas, el denominador común en los centros mineros venía dado por las condiciones extremas de dureza que debían soportar los trabajadores en el desempeño de su labor: Los horarios abusivos y el ínfimo salario percibido provocaron que estos obtuvieran como producto de su esfuerzo un estado de absoluta precariedad en todos los ámbitos de sus vidas y las de sus familias.
El conjunto de todo ello y la pasividad e indolencia con que las compañías concesionarias abordaron esta realidad consiguieron que en muy breve espacio de tiempo surgieran en las minas los primeros conflictos que, en forma de huelgas y movilizaciones, los obreros trataron de utilizar como medida de presión para procurarse una mejora de sus condiciones laborales y de existencia.
Conscientes de cuales son las causas que les impiden resolver con acierto sus expectativas de mejoras laborales y en sintonía con idénticas circunstancias y experiencias conocidas en otros ámbitos de producción, los trabajadores de las minas comienzan a organizarse promoviendo asociaciones de carácter societario -Sindicatos Obreros, Sociedades de Socorros Mutuos y Cooperativas de Consumo- y de carácter político, momento en que tiene lugar en la cuenca minera la aparición de las primeras agrupaciones de trabajadores organizadas bajo la influencia o con el significado de la ideología Socialista.
AGRUPACIÓN SOCIALISTA DE OBREGÓN (“EL PROGRESO”)
Al igual que en otras zonas de España y concebido como una necesidad ante el creciente estado de indefensión a que se veían abocados los trabajadores por efecto de la aparición de procesos productivos cada vez más exigentes, el asociacionismo obrero iba a iniciarse en Villaescusa a lo largo del siglo XIX, y comenzó materializándose en la fundación de las ya comentadas sociedades de socorros mutuos primero, y de cooperativas de producción y consumo después, alcanzando su mejor exponente en nuestro ayuntamiento a partir de la década de los años ochenta del citado siglo XIX con el nacimiento de las entidades de resistencia, y más tarde con las asociaciones obreras con objetivos políticos.
Apoyados e influenciados por la Agrupación Socialista de Astillero, fundada en el año 1899, en el mes de Agosto de 1903 se constituye en Cabárceno la Agrupación Socialista “El Nivel”. De esta forma surge el primer foco reivindicativo enclavado en los centros mineros. Si bien es cierto que, debido principalmente a la improvisación y ausencia de una mínima organización en su planificación y posterior ejecución, las primeras huelgas que promovió y de las que se tiene conocimiento se saldaron generalmente con resultado negativo para los intereses de los trabajadores, no tardó en obtener resultados significativamente positivos y beneficiosos como producto de sus planteamientos reivindicativos y movilizaciones.
En los primeros días del mes de Junio de 1904, animados tras asistir en calidad de invitados a la fiesta del primero de Mayo organizada por la Agrupación Socialista de Cabárceno, un grupo de trabajadores se reúnen para constituir una AGRUPACIÓN SOCIALISTA OBRERA en OBREGÓN con el objeto de defender y propagar las ideas socialistas y servirles de instrumento para la “lucha política”. A esta Agrupación la denominan “EL PROGRESO” y su reglamento indicaba que para formar parte de ella sería necesario estar conforme con el programa de la Agrupación y acatar las resoluciones de sus Asambleas. Sus afiliados deberían observar una conducta honrada y sería conveniente que pertenecieran a la Sociedad de resistencia de su oficio. Serían motivo de expulsión: difundir ideas contrarias a los principios de la Agrupación, faltar a la solidaridad obrera o calumniar a cualquier compañero. La Agrupación celebraría reuniones ordinarias cada tres meses. Habría un Comité compuesto por presidente, vicepresidente, secretario, vicesecretario, tesorero, contador y tres vocales. También existirían una Junta de Discusión formada por presidente, secretario y dos vocales; así como una Comisión Revisora de cuentas, constituida por tres socios.
Podemos hacernos una idea de que el movimiento que dio origen a la creación de esta primera Agrupación Socialista en el municipio de Villaescusa tuvo un importante componente de espontaneidad y un marcado carácter defensivo. El déficit permanente y el deterioro progresivo en las condiciones laborales y sociales de los trabajadores de las minas y por ende de sus familias terminó por provocar la exigencia colectiva de reivindicar para sí la satisfacción de derechos tan legítimos socialmente como eran y son una correcta atención no sólo en las cuestiones salariales, sino también en aquellas otras materias relativas a la vivienda, educación, sanidad, etc.
El primer comité directivo de la Agrupación, según se desprende de la reseña publicada por “La Voz del Pueblo” el día 18 de Junio de 1904, estaba integrado por las siguientes personas: PRESIDENTE: Mateo Valverde, VICEPRESIDENTE: Victoriano Saiz, SECRETARIO: Marceliano López, VICESECRETARIO: Valentín López, TESORERO: Rogelio Bascones, CONTADOR: Juan Mateos, VOCALES: Felipe Cordero, Manuel Carnicero y Bernabé González. La misma fuente nos indica que esta Agrupación Socialista de Obregón contaba, a fecha de 1 de Noviembre de 1904, con 65 afiliados.
AGRUPACIÓN SOCIALISTA DE LIAÑO (“LA IGUALDAD”)
El primer comité directivo de la Agrupación, según se desprende de la reseña publicada por “La Voz del Pueblo” el día 8 de Octubre de 1904, estaba integrado por las siguientes personas: PRESIDENTE: Pablo de la Iglesia, VICEPRESIDENTE: Eduardo Berjón, SECRETARIO: Alberto Pascual, VICESECRETARIO: Francisco Cabezas, TESORERO: Severo Castellano, CONTADOR: Benito Crespo, VOCALES: Moisés López, Celedonio Alonso y Pedro Rivas. También de “La Voz del Pueblo” se extrae la información de que esta agrupación Socialista de Liaño contaba, a fecha de 1 de Noviembre de 1904, con 35 afiliados.
Las Agrupaciones Socialistas de Obregón y Liaño ya estuvieron representadas, en el marco de la delegación comisionada por parte de la Federación Montañesa, en el VII Congreso del PSOE celebrado en Madrid del 5 al 11 de Mayo de 1905. Un congreso donde se dieron cita gran parte del total de las 144 colectividades existentes en ese momento en el País y en el que se acordó, como deber inexcusable del Partido Socialista, auxiliar a sus correligionarios presos por defender las ideas del mismo o los intereses de la clase trabajadora, así como apoyar económicamente a los procesados por dicho motivo.
Organizadores y oradores participantes en un mitin en Astillero el 26-8-1906
Pablo de la Iglesia es el primero por la derecha de la foto
En este contexto el socialismo de Villaescusa se va asentando y creciendo paulatinamente en medio de un clima de constantes conflictos y reivindicaciones obreras. Sus primeros lideres y militantes ya se dejan ver y participan en los mítines y actos que se organizan en estos años por los diferentes Centros y Asociaciones Obreras con implantación en la zona. Este es un periodo de incuestionable expansión y asentamiento de los postulados socialistas, provocado sin duda por el naciente sentimiento de solidaridad obrera que se desprende de ese momento de extraordinaria conflictividad laboral, con huelgas, manifestaciones y movilizaciones constantes en la década que siguió a la constitución de las Agrupaciones.
Sin embargo, la entrada en las instituciones político-administrativas aún tardará en llegar, pero su huella en las instituciones económicas y sociales ya se deja notar. Los primeros intentos para integrarse en los Ayuntamientos fracasan, pero dejan el testimonio, lo mismo que sus “peticiones” en los mítines y fiestas que se celebran cada año con motivo del primero de Mayo. La mayoría de las veces sólo son “palabras que se lleva el viento”, pero en su conjunto son acciones que van contribuyendo a conformar la conciencia de clase.
PRIMERAS AGRUPACIONES SOCIALISTAS CONSTITUIDAS EN CANTABRIA
Nº | FECHA FUNDACIÓN | AGRUPACIÓN | FINALIDAD |
1 | 16 de Mayo de 1887 | Santander | Lucha Política |
2 | 2 de Abril de 1899 | Astillero | Lucha Política |
3 | 29 de Septiembre de 1900 | Otañes (Castro Urdiales) | Lucha Política |
4 | 31 de Marzo de 1901 | Mioño (Castro Urdiales) | Lucha Política |
5 | 1901 | Talledo (Castro Urdiales) | Lucha Política |
6 | 11 de Abril de 1901 | Peñacastillo | Lucha Política |
7 | 2 de Julio de 1902 | Castro Urdiales | Lucha Política |
8 | 13 de Septiembre de 1902 | Torrelavega (Refundada el 1-4-1904) | Lucha Política y Resistencia |
9 | 10 de Agosto de 1903 | Cabárceno “El Nivel” | Lucha Política |
10 | Junio de 1904 | Obregón “El Progreso” | Lucha Política |
11 | 1 de Octubre de 1904 | Liaño “La Igualdad” | Lucha Política |
12 | 26 de Diciembre de 1904 | Pámanes “El Desengaño” | Lucha Política |
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